Los recursos humanos para la excelencia

Image
Muchas organizaciones ahora pretenden introducir el enfoque "Lean", sabiendo que tiene alto potencial como herramienta para mejorar en gran medida su competitividad.

Lo que se llama "Lean Manufacturing ", Excelencia Operacional,…, se basa en tres principios fundamentales:
  • La mejora continua como una actividad fundamental
  • Lucha contra el “despilfarro”[1] como un principio rector
  • La participación máxima de los Recursos Humanos

La aplicación de este sistema de gestión puede dar grandes resultados y refuerza sustancialmente la posición competitiva de cualquier organización. Para que esto suceda, sin embargo, es muy importante no confundir la aplicación de las herramientas individuales con la introducción de un nuevo sistema de gestión de la empresa. Es precisamente esto último lo que puede marcar la  gran diferencia.

La búsqueda de las causas de los problemas

Debido a que los empleados se sienten motivados para poner de relieve los problemas y para generar la mejora continua, es importante cambiar profundamente la mentalidad de todo el equipo de Dirección.

Desde la Alta Dirección a los Supervisores o Jefes de equipo la actitud hacia los problemas debe estar dirigida a buscar las causas y no los culpables. Cuando, de hecho, la identificación de las causas se ha centrado en los problemas que no se resuelven y se repiten a menudo, la gente tiende a dedicar mucha energía para mostrar u ocultar los problemas y responsabilidades y no a resolverlos. La búsqueda de las causas implica utilizar un método cuyo objetivo es analizar los procesos y buscar la fuente de los problemas. Aquí, la tarea del equipo de gestión es la difusión de una mentalidad orientada a buscar en profundidad las causas y no los autores. Esta mentalidad se tiene que transmitir sobre todo con el ejemplo del equipo directivo.

La dirección por políticas
La mejora continua no se puede hacer de forma espontánea.
Para conseguir que el personal involucrado en actividades de mejora continua y actúe de forma espontánea el mejor enfoque es desarrollar una participación de abajo hacia arriba. Esto significa que el personal de base se tiene que preocupar y decidir por sí mismo qué cuestiones priorizan y en qué centran su atención. De hecho, en las empresas donde el equipo de dirección se crea de forma real para dar participación a los recursos humanos, el enfoque de mejora de la organización es muy diferente.
El papel estratégico que corresponde a la dirección es indicar hacia donde se debe dirigir los esfuerzos de mejora, clarificar cuales son los objetivos hacia los que es necesario orientar todos los esfuerzos de mejora. [BM1] De esta manera, la participación del personal en la mejora continua se vuelve estratégico, y se incorpora en las agendas de la alta dirección de forma natural. Lo convertiremos así en una verdadera herramienta estratégica que sin duda marcará la diferencia. Para ello, la metodología de la Dirección por Políticas, o Hoshin Kanri funciona realmente bien.

La Dirección por Políticas provoca un importante flujo de comunicación entre el equipo de Dirección y los mandos intermedios de la empresa, en relación con los objetivos que se persiguen. Con ella conseguimos una comunicación basada no solo en el cuánto tenemos que conseguir sino en el cómo podemos hacerlo, lo cual es crucial para asegurarse de que existe una fuerte alineación de toda la estructura y evitaremos resultados cortoplacistas o parciales.
La gestión de los recursos humanos se rige por 5 valores fundamentales:
Cambio –  Crear un sentimiento de transformación
Kaizen – creer en el valor estratégico de la mejora continua en cada ámbito
Gemba – Tener la “humildad” de mantenerse en contacto con la operativa diaria
Respeto -  Respeto profundo por las personas
Trabajo en equipo – Comprender el valor del trabajo en equipo como fuente de crecimiento y de motivación.
Se entiende por despilfarro ("muda") cualquier actividad desarrollada por una empresa que consume recursos y no produce valor para el cliente.